WARREN CARTER
MATEO Y LOS MÁRGENES Una lectura sociopolítica y religiosa
Traducción: Serafín Fernández Martínez
évit verbo divino
~
Editorial Verbo Divino Avenida de Pamplona, 41 31200 Estella (Navarra), España Teléfono: 948 55 65 05 Fax: 948 55 45 06 www. verbodivino.es
[email protected] Traducción: Serafín Fernández Martínez Título original: Matthew and the Margins. A Sociopolitical an,d Religious Reading Ilustración de sobrecubierta: Hans Brunner (Detalle del tí1npano de la puerta del Sarmenta~ Catedral de Burgos) Diseño de sobrecubierta: Francesc Sala © Orbis Books, Maryknoll, NY 10545-0308, EE.UU. © Editorial Verbo Divino, 2007
Fotocomposición: NovaText, Mutilva Baja (Navarra) Impresión: GraphyCems, Villatuerta (Navarra) Impreso en España • Printed in Spain Depósito legal: NA 2.238-2007 ISBN: 978-84-8169-757-5
CONIENIDO
SIGLAS Y ABREVIATURAS .................................................................
17
PRÓLOGO...........................................................................................
21
INTRODUCCIÓN ................................................................................ l. Lectura y audición de una narración a la contra .... .... .. .... 2. ¿Qué hacen los evangelios? Legitimación de una identidad y de un modo de vivir .. .... .. ..... .. .. .... .... .... .. .... ... .. ........ .. 3. ¿Cómo forma el evangelio la identidad comunitaria y configura el estilo de vida? .................................. ............... 4. El quién, el dónde y el cuándo del evangelio de Mateo .. 5. El discipulado en Antioquía ............................................... 6. ¿En qué sectores de la sociedad antioquena se encontraban los cristianos de Mateo? ........... ...... ... .. ......................... 7. El público de Mateo, pequeño en número ....................... 8. Tensión_ c~n un~ sinagoga .. ..... ....... .................................... 9. Presencia 1mpenal romana ................................................. 10. Preconización de una existencia marginal ........................
27 29 36 38 46 50 62 65 69 79 89
1 PRIMERA UNIDAD NARRATIVA DIOS AUTORIZA A.JESÚS (1,1-4,16) PARTE
l. para Dios y de (Contra las herejías 3.1.1) 64 • Ahora bien, ¿qué base tiene esa vinculación? ¿Por qué el nombre de Mateo llegó a ser asociado con este evangelio? Se han elaborado algunas buenas hipótesis. Mateo significa (lla6TJTI)s, mathetes), cuyo significado literal es >; Katz, «lssues in the Separation», 63-75. 172. Stanton, >, 178. Compárese Mt 9,1-8 con Me 2,1-12; Mt 12,31-37 con Me 3,28-30.
INTRODUCCIÓN
77
miento (3,2) y la gente acude, «confesando sus pecados>> (3,6; así Me 1,5), pero el perdón sólo lo otorgaJesús. e) En la última cena según Mateo, Jesús describe la copa como «mi sangre de la alianza que es derramada por muchos para el perdón de los pecados» (26,28). Mateo añade a Me 14,24 estas palabras puestas aquí en cursiva. También la cruz y la muerte de Jesús, así como su vida (9,1-8), son un medio de perdón. d) Mateo añade además varias secciones recordatorias de que la indulgente misericordia de Dios activa en Jesús lleva al perdón entre los miembros de la comunidad (5,23-24; 18,23-35; cf. 6,12.14-15). 2) Jesús manifiesta la presencia de Dios
Aparte de salvar de los pecados (1,21),Jesús está destinado a manifestar la presencia de Dios entre los hombres (1,23). Aunque Jerusalén ha sido destruida a causa del pecado, Dios no ha retirado su presencia sino que la ha manifestado en Jesús. Este tema se encuentra entretejido en la narración en secciones exclusivas de Mateo. Su aserción inicial en 1,23, además de adquirir autoridad al tomar la forma de una cita escriturística, por su ubicación al comienzo del evangelio ofrece una perspectiva de todo lo que viene después. Las subsiguientes acciones de Jesús de llamar a los discípulos, curar enfermos, enseñar, expulsar demonios, etc., manifiestan la presencia de Dios. Tal presencia se encuentra también entre la comunidad que se reúne en nombre de Jesús para orar (18,20), en su misión de misericordia entre los desheredados (25,31-46) y en su misión de enseñanza y predicación (28,18-20). 3) Jesús interpreta la voluntad de Dios
Mateo presenta a Jesús como el único que trae la interpretación de la voluntad de Dios. Si la destrucción de Jerusalén fue el castigo divino por el pecado, ¿cómo conocer la voluntad de Dios con certeza para evitar un futuro desastre? La respuesta del evangelio apunta a Jesús. En una sección exclusiva de Mateo (5,21-48) ,Jesús cita seis tradiciones judías y ofrece su interpretación definitiva. Con ello se amplía la declaración efectuada en 5,17 de que Jesús no ha venido a . Jesús interpreta las tradiciones de las Escrituras para indicar su «Verdadero>> significado (9,11-13; 11 ,10; 12,18; 12,9-14; 13,14-17; 15,1-20; 19,3-12; 22,34-40; 22,41-46). La vida de Jesús muestra también una completa coherencia con las Escrituras: su nacimiento (1,23; 2,6.15.18) y el lugar donde se cría (2,23; 4,15-16), sus curaciones (8,17), su método de enseñanza (parábolas, 13,35), su acción de ir a Jerusalén (21,5), su arresto (26,56) y la traición (27,9-10). Jesús interpreta esas tradiciones escriturísticas.
78
INTRODUCCIÓN
A sus discípulos les pide que vivan sus enseñanzas y no las de los dirigentes religiosos cuyas tradiciones y prácticas no reflejan la voluntad de Dios (12,1-14; 15,1-20, esp. v. 13; 16,1-12; 23,2-4). Oír y poner en práctica sus palabras es el criterio por el que las personas se salvan o se condenan en el juicio (7,24-27). Las palabras de Jesús sirven de enseñanza autorizada para la comunidad (24,35; 28,20). En el período posterior al año 70, la comunidad mateana entiende que en la interpretación de la tradición por Jesús, no en la interpretación de Moisés ni de alguna otra figura reveladora, como tampoco en la enseñanza y práctica de los dirigentes religiosos, se encuentra la verdadera y definitiva manifestación de la voluntad de Dios 179 • Los debates posteriares a 70 d. C. En una situación de crisis y reformulación en el judaísmo posterior al año 70 y, por tanto, ya sin el templo, numerosas obras escritas en nombre de figuras con tanta autoridad como Abrahán, Henoc, Moisés, Baruc, Esdras y Salomón se presentan como revelaciones y enseñanzas definitivas. La tradición mosaica era fundamental en los círculos farisaicos. Dentro de ese contexto, la comunidad de Mateo dice encontrar la presencia misericordiosa y salvífica de Dios, así como su imperio, en Jesús y en la comunidad de sus adeptos. Por eso, explícitamente, Mateo presenta a Jesús haciendo uso de tradiciones y símbolos judíos. Desciende de David y Abrahán (1,1). Es la Sabiduría (11,19.25-27). Es más grande que el templo (12,6), que Jonás (12,41), que Salomón (12,42). La adhesión a él, y no pretensiones de origen étnico y privilegio basadas en descendencia de Abrahán (3,7), proporciona la base para el pueblo de Dios (cf. 12,50; 21,43; 22,7). Además, el hecho de que en Jesús se manifiesten el perdón, la presencia y la voluntad de Dios es importante también para los gentiles. Jesús desciende de Abrahán, a través del cual prometió Dios bendecir atodas las naciones de la tierra (Gn 12,1-3). Mas, al parecer, los jefes de la sinagoga encontraron inaceptables esas afirmaciones. En la narración evangélica, los dirigentes consideran blasfemas las palabras con que Jesús dice perdonar los pecados (9,3). Atribuyen al diablo sus aseveraciones sobre el imperio de Dios (9,34; 10,25; 12,24). Al señalar su asociación con «recaudadores de impuestos y pecadores>>, lo tachan de ser «un glotón y un borracho>> (11,19). Consideran que merece la muerte por quebrantar el sábado (12,14). Cuestionan su autoridad y la fuente de ella (21 ,23-27) y, por supuesto, les molesta que denuncie sus orígenes (15,13-14), su actuación como dirigentes (21,28-46) y su ignorancia del poder y la palabra de Dios (22,29). Niegan que sea un agente de la salvación de Dios y lo tildan de impostor (27,63).
179. Para un examen de otras afirmaciones de revelación autorizada en relación con Juan, véase Carter, «Prologue andjohn's Cospel>>.
INTRODUCCIÓN
79
Que esas reacciones reflejen auténticas actitudes de la sinagoga en tiempos posteriores, es algo que no se puede asegurar. Una situación de creciente tensión y antagonismo, de acusaciones cruzadas, tiene como inevitable resultado la negativa de cada uno de los grupos enfrentados a reconocer la legitimidad del otro. La tensión es agria y tiene efectos sociales perniciosos. Los conflictos teológicos o ideológicos acaban traspasando en ámbito del pensamiento y causando ruptura de amistades, divisiones en las familias (10,34-36) y pérdidas de relaciones socioeconómicas, de honor y de influencia política. Los márgenes son el lugar donde se acumulan los rechazados por el centro dominante 180 • Importa subrayar que la atmósfera de conflicto dentro de una comunidad sinagogal no significa secesión deljudaísmo. El judaísmo del siglo I no formaba un conjunto monolítico con una sinagoga oficial, un grupo dirigente claramente reconocido, una serie de prácticas y un repertorio de creencias. Esencial para entender la situación de la comunidad (en gran parte) judía de Mateo adicta a jesús es la percepción de que está emuelta en una lucha local dentro de una sinagoga respecto a su lugar en la tradición común. Comparten las mismas tradiciones escriturísticas. También el mismo énfasis en la presencia de Dios, en el conocimiento de su voluntad, en la obtención del favor y el perdón divinos, en el culto, en la obligación de llevar una vida fiel. Pero junto a ese compartir historia, tradiciones, relaciones y prácticas hay motivo de división: la afirmación de que Jesús ocupa un puesto central en esas tradiciones, las interpreta definitivamente y manifiesta la presencia salvífica y el imperio de Dios. La sinagoga de origen rechaza cada vez más la postura y las prácticas de la comunidad mateana y no ve que Jesús deba ocupar ningún lugar preeminente. El público de Mateo es, pues, un grupo judío en tensión con una comunidad sinagogal aún troquelada por tradiciones judías compartidas y fiel a ellas.
9. PRESENCIA IMPERIAL ROMANA
Aparte de esa pugna dentro de la comunidad judía, el público de Mateo encuentra otro contexto difícil en Antioquía, el de la presencia imperial romana, o lo que Walter Wink ha llamado «sistema de domina-
180. Saldarini (Mattew's Christianfewish Community, 107-16, pássim) prefiere el término de acuñación sociológica deuiant () y lo usa para designar la relación entre . Esa noción reconoce la existencia del centro y de los márgenes, admite una experiencia de los márgenes a veces negativa y a veces positiva, pero afirma la realidad de la participación simultánea en mundos distintos, con la fuerza y la riqueza derivadas de ello 223 • No pertenecer al centro no significa estar desvinculado de él y de cualquier otra parte. Esa no pertenencia puede significar una libre elección de los márgenes y un situarse ocasionalmente en el centro. Más que la idea de no pertenencia a dos mundos o de una vida entremedias de ellos, Lee entiende la existencia marginal con un vivir en ambos mundos. Un libro de G. Germani publicado en 1980 llama la atención sobre otro elemento de la marginalidad, más allá de la experiencia positiva y negativa de vivir en dos mundos de manera simultánea. Se centra en individuos y subgrupos que en valores, normas y prácticas difieren de la mayoría 224 • Esos grupos, aun siendo miembros de la sociedad más amplia y manteniéndose en ella, están excluidos del centro de poder y existen en la periferia. No participan «en esas esferas en las que, según determinados criterios, deberían desenvolverse». No entran en el > y la «esposa>>, aunque la boda no se celebraba hasta aproximadamente un año después (José es esposo en 1, 16.19; María es esposa en 1,20). Durante ese período, la mujer seguía con su familia, y lapareja no hacía vida en común ni tenía relaciones sexuales. Si ella llegaba a tenerlas con otro hombre, cometía adulterio. Para deshacer el desposorio hacía falta un acta de divorcio. La aparición de las palabras su madre y desposada en una misma frase no es nada frecuente. Pero hay una complicación añadida. Antes de vivir juntos, se encontró que estaba encinta. La primera oración, Antes de vivir juntos, tiene un doble significado: a) antes de empezar a cohabitar después de la boda propiamente dicha, y b) antes de haberse relacionado ellos sexualmente.José y María no habían tenido ese tipo de contacto; sin embargo, se encontró que estaba encinta. Ella no es identificada como virgen hasta 1,23. Sin esta información, José no podía por menos de pensar que había tenido contacto sexual (¿queriendo?, ¿seducida?, ¿violada?) con otro hombre29. Esto suponía una grave contravención de los preceptos imperantes en aquella sociedad (cf. Dt 22,23-27). Embarazada y desposada, María, según los valores culturales aceptados por la mayoría, se encuentra en los márgenes sociales, económicos y religiosos. Jane Schaberg señala las maldiciones contra las adúlteras y sus hijos formuladas en Eclo 23,22-26 y Sab 3,16-19; 4,3-6 30 • La adición de del Espíritu Santo aclara (a los lectores, no a José) que la concepción no se debe a infidelidad de María ni a contacto con varón alguno. Es resultado del Espíritu, el poder creador de Dios en acción, el agente de la voluntad de Dios, como en Gn 1,2 31 • Esta concepción sin intervención de hombre y fuera del matrimonio obvia la estructura patriarcal de la familia recalcada en 1,1-17. Dios no está sujeto a una estructura que privilegia el poder masculino. Antes al contrario, parece oponerse a ella, tema que continuará al crear Jesús una nueva comunidad en la que la casa «no es gobernada, ni siquiera representada, por un cabeza de familia varón>> 32 (véase 4,18-22; 12,46-50; caps. 19-20). Y, segundo, la exclusión de la paternidad humana anticipa el tema de que para la pertenencia a la nueva comunidad de Jesús es irrelevante la línea biológica o étnica 29. ~obre estas posibilidades, cf. Schaberg, ll!Rgitimacy of]esus, 152. 30. Id., >, 3,14-15). 3) Después del bautismo (3,16-17) se produce un acontecimiento revelador. A la visión de los cielos abiertos se añade una voz procedente de ellos que presenta a Jesús como el agente ungido y dotado de poderes por Dios para que lleve a cabo los planes divinos. Centrándose en Jesús y dando a conocer nuevos datos sobre él, la escena continúa la explicación de su identidad de 1,18-25. 3,13 Jesús realiza su primera acción en el evangelio (recordemos la pasividad e indefensión del en el cap. 2). Entonces Jesús llegó de Galilea (2,22-23) al Jordán, a Juan, para ser bautizado por él (véase, 3,5-6). Como con los magos en 2,1 y Juan en 3,1, el verbo llegar (napaytvnm, paraginetaz) denota acción de Jesús. Las tres categorías de personajes, a diferencia del estático centro jerosolimitano con su elite política y religiosa, atienden a la voluntad de Dios. La alianza entre Juan yJesús sugiere que ambos están de acuerdo en la inminencia del juicio, en el carácter pecaminoso del presente y en la necesidad del arrepentimiento para escapar a la ira de Dios. 3,14 Juan trataba de impedírselo. Juan reconoce a Jesús como aquel del que ha hablado en 3,11-12. La predicción de Juan sobre uno es correcta, y su predicación fiable. Además, su resistencia a bautizar a Jesús está en consonancia con la humildad que ha manifestado en 3,11. Actuando coherentemente con sus expresiones, Juan muestra una integridad de palabra y acción que este evangelio valora (como se ve en la enseñanza de Jesús [5,37], en la coherencia de Jesús con lo enseñado [cf. 6,10b y 26,42b] y en su condena de la hipocresía [cap. 23]). Además, al reconocer que necesita el bautismo de Jesús (Soy yo el que necesita ser bautizado por ti, ¿y vienes tú a mí?), Juan ejemplifica la respuesta receptiva que pide de sus oyen tes en los w. 11-12. El griego enfatiza los pronombres yo, ti, tú, mí, que marcan el contraste entre las dos figuras.
EL MINISTERIO DE JUAN
169
3,15 Pero Jesús le respondió: «Sea así ahora>>, manifestando autoridad. Su palabra inicial de Jesús es un imperativo (sea), que requiere obediencia inmediata (ahora). Y la explicación que ofrece de su bautismo es porque conviene que así cumplamos todajusticia/rectitud 24 • El verbo cumplir no significa, como algunos han propuesto, simplemente hacer la voluntad de Dios. Con este significado, el evangelio emplea más frecuentemente otros tres verbos: hacer, guardar y observar 25 • El verbo cumplir ya ha aparecido en 1,22; 2,15.17.23 para introducir una cita de la Biblia hebrea (así también 4,14; 5,17; 8,17; 12,17; 13,35; 21,4; 26,54.56; 27,9). Indica que lo que está sucediendo en el ministerio de Jesús (o en las circunstancias que lo acompañan) es conforme a la voluntad de Dios anteriormente declarada en las Escrituras y la lleva a efecto o realiza. ¿Cuál es la justicia realizada a través del bautismo de Jesús? El evangelio emplea el término 8lKmoaúvr¡ (dikaiosyne. justicia/rectitud) siete veces (3,15; 5,6.10.20; 6,1.33; 21,32), y se han propuesto cuatro significados: 1) En opinión de ciertos autores, el término apunta siempre a la actividad salvífica de Dios. 2) Algunos creen que en todos los casos hace referencia al cumplimiento de los mandatos de Dios por los hombres. 3) Otros entienden que están presentes ambos elementos: el don de Dios y la acción humana. 4) Otros, en fin, señalan que no hay una continuidad en el uso del término y que es preciso determinar el significado caso por caso. ¿Cuál de estas posiciones es la acertada? En la raíz, dentro de la tradición hebrea, justicia/rectitud no es, como en el pensamiento griego, un ideal por el que puedan ser medidas las acciones, sino la actuación fiel a los vínculos y compromisos 26 • Dios es recto o justo en cuanto que actúa con fidelidad a los compromisos de la alianza para salvar y liberar al pueblo. Vemos, por ejemplo, que salvación/salvador y liberación/rectitud son términos paralelos aplicados a acciones salvíficas de Dios en Sal51,14; 65,5; Is 46,13; 51,5-8. Que el pueblo de Dios o los reyes
24. Abunda el debate sobre esta frase. Véanse los comentarios y Meier, Law and History in Matthew's Cospel, 73-81. 25. Cf. 'TTOLEÍ:V (poiein, > cuando sea quebrada la «vara de su opresor>> (Is 9,1) por quien encarnará el reinado de Dios de justicia, rectitud y paz (11,4-7). Mateo transfiere el texto de Isaías de una situación de agresión imperial a otra 21 • Zabulón y Neftalí, tierra dada por Dios al pueblo (Dt 34,1-4; Jos 19,1 0-16.32-39), sigue bajo el poder imperial. Su control, ejercido no ya por Asiria, sino por Roma, se ha vuelto más estrecho desde los éxitos de las tropas romanas en Galilea en 67 d.C. Galilea de los Gentiles, un sinónimo para Zabulón y Neftalí, designa un estado de ocupación, una tierra bajo el poder de imperialistas gentiles, poseída y gobernada por ellos (cf. 2 Re 17,24-27) 22 • La designación no subraya, como han sostenido algunos, que Galilea estaba habitada por no judíos, ni que era susceptible de helenización (cosas ciertas las dos), ni que en ella casi había desaparecido la piedad, ni que jesús buscaba sólo gentiles (cosas no ciertas las dos; cf. 4,1822.23-25) 23 • Alude simplemente a control romano (Josefo, GJ7.216-17). El dominio imperial es imaginado al describir Galilea de los Gentiles como un lugar de tinieblas y muerte en el que brilla una luz (4, 16). Las tinieblas simbolizan diversas realidades 2\ especialmente lo que es contrario a los vivificantes planes de Dios: el caos antes de la luz creadora y la vida traídas por Dios (Gn 1 ,2), la opresiva realidad de la esclavitud en Egipto (Ex 10,21.22; 14,20), el dominio de Asiria (Is 8,22), el destierro en Babi-
21. No puedo estar de acuerdo con Davies y Allison (Matthew 1, 380), quienes hablan de > o «humildad>> en aceptar piadosamente la pobreza. Esta frecuente interpretación (la pie~ dad de los anawim) es incompatible con la idea de que Dios salvará a los pobres (cf. Is 61,1-2) 12• Más cerca del significado verdadero nos llevan expresiones como (Sal 34,18). El es el lugar de la pobreza o del abatimiento. Cuando hay pobreza en el espíritu humano se produce una situación similar a la de la pobreza económica: sin recursos ni esperanza, uno queda sometido a los embates de fuerzas mayores. Los pobres de espíritu son, pues, los económicamente pobres cuyo ser o espíritu está abatido, aplastado por la injusticia económica. No tienen ningún atisbo de esperanza, pero conocen el efecto corrosivo de vivir sin ella su pobreza. Son descritos en varios salmos como los oprimidos por los inicuos. Incluso Dios parece haberlos olvidado (Sal 10,1-13 [la esperanza llega en el v. 14]; 34,17.22-23; 68,1-2; 82;Job 24). No se benefician de la prometida salvación por obra divina, sino que viven > a causa de los malvados ( 3 7,1). Son exhortados a esperar , porque acabará llegando de Dios la salvación (37,10). ¿Con quién identificar a esas personas? Son los nombrados en 4,18-22, que se encuentran atrapados (mediante impuestos y deudas) en un sistema económico de explotación y que no controlan su propio destino. Son los enfermos, los posesos y los lunáticos de 4,24, cuya enfermedad indica que acarrean los perniciosos efectos del sistema imperial. Habiéndoles sido negada la justicia, unos recursos adecuados y el acceso a la salud, y estando sometidos al poder de la elite, no hay para ellos esperanza de cambio. A menos que se produzca una intervención divina 13• La predicación por Jesús del imperio de Dios (véase acerca de 3,2; 4,17) y su demostración de él en curaciones (cf. 4,23 y cap. 8) inician un cambio radical incluso ahora, como indica el empleo del presente en la segunda parte de la bienaventuranza (de ellos es). El poder de Jesús sobre los demonios, el pecado y el infortunio revela que el statu quo no es definitivo y anticipa la realización completa de los planes de Dios. Jesús alienta a una comunidad con la esperanza de un cielo futuro y una tierra en la que se hace la voluntad divina (6,10; 19,28). Cuando el reinado de Dios, ahora iniciado en Jesús, llegue a ser completo, no habrá pobres de espíritu. La bienaventuranza señala la dicha de que la acción de Dios ponga fin a las estructuras imperiales aún vigentes.
12. Roth, The Blind, the Lame, and the Poor, 115-25, 132-41. 13. Dios interviene en favor de los pobres, por ejemplo, con leyes especiales (Ex 21-23), atendiendo de manera no especificada a sus lamentos (Sal 12,5), encargando de su protección a reyes justos (Sal 72,1-14), mediante las amonestaciones de los profetas (Is 3,14-15; 10,1-2; Am 2,7; 4,1; 5,11), con la destrucción punitiva de los ricos y los poderosos (Am 5,11-27), con las misericordiosas acciones de los hombresjustos (Prov 19,17; 28,27; Eclo 4,1-4.8).
JESÚS ENSEÑA: COMIENZA EL SERMÓN DEL MONTE
211
5,4 La declaración de que los pobres son dichosos (cf. 5,3) porque Dios está en proceso de liberarlos resuJta tan sorprendente que necesita ser repetida. Dichosos los que lloran. Estos no se afligen por sus pecados, sino que, sobre la base deIs 61,1-3 (en que también se nombra a los pobres), lloran o lamentan el efecto destructor de potencias imperiales como Babilonia (y Roma) que oprimen al pueblo de Dios. lloran por culpa de los que hacen el mal (Sal 34,11), como la poderosa elite (Is 3,26; Jr 4,28; 14,2), otras naciones (ls 16,9; 19,8) o el tirano Antíoco Epífanes (1 Mac 1,27; 2,14.39). Nótese el efecto de Asiria, Babilonia y Herodes en 2,18, donde Raquel llora a causa de sus devastadoras acciones. lloran porque agentes del diablo gobiernan el mundo de Dios (véase 4,8). La literatura consolatoria grecorromana suele desaprobar las muestras de dolor como propia de las masas incultas. Plutarco emplea temas tradicionales en la «Consolación de su [propia] esposa» (Obras morales 608-612B). Insta a su mujer a refrenar el dolor por la muerte de la hija de ambos a la edad de dos años (608C, F-609A, 609F-610A, 612A-B) y a aceptar lo deparado por la Fortuna (610D-611AF) 14 • Pero, en Mt 5,4, el gobierno opresor es percibido «desde abajo••, por los que sufren las relaciones sociales injustas, y no > sinagogas, las de ellos; así también en 9,35; 13,54). Esta es la primera de varias referencias negativas a la hipocresía (6,5; cf. 23,6) y a la resistencia (10,17; 12,9; 13,54; 23,24) que se encuentran en las sinagogas. Pero no sólo se describe peyorativamente el modo de dar limosna, sino también la motivación: para que otros los alaben. El verbo alabar reemplaza a de 6,1, dando mordacidad al ataque. Detrás de él está el griego 8o· eá(w (doxazo), que literalmente significa . Se usa en 5,16 para subrayar que el fin de las buenas obras es inducir a otros a que glorifiquen a Dios. Los hipócritas roban la gratitud y la alabanza que corresponden a Dios, el dador y sostenedor de la vida (5,45; 6,25-34). Pero el aplauso humano que obtengan de los hombres será su única recompensa (véase
8. Oakley, , 118-35.
JESÚS ENSEÑA: SIGUE EL SERMÓN DEL MONTE
251
5,12; 6,1) •. Ni siquiera la satisfacción de que el beneficiado con la limosna disfrute de ella. No hay solidaridad ni relación justa. La sinagoga refleja la sociedad imperial en que se halla, en vez de establecer una práctica alternativa (5,20). Al pronunciar su autoritativo en verdad os digo, Jesús indica el destino escatológico que los aguarda, presentándolo como voluntad de Dios (así también su enseñanza 5,18.22.28.32.34.39.44). 6,3-4
En contraste con la sinagoga y la sociedad imperial de la que es reflejo, la comunidad de discípulos (a la que Jesús se dirige con un pronombre en singular: tú) procede de modo alternativo respecto a esa sociedad. La hipérbole lo subraya. Cuando tú des limosna, no dejes que tu mano izquierda sepa lo que hace la derecha, a f"m de que tu limosna quede en secreto. En vez de espectáculo público, ayuda en secreto, a imitación de Dios, tu Padre, que ve en lo secreto 10 (cf. Sal 33,13-15; 139,~16; Prov 25,2; Eclo 16,17-23; 23,17-21; 42,15-25; Testjob9,7-8; Testead 5,3; 2 Bar83,3). Nótese en 2 Mac 3,39; 735; 9,5 la noción de un Dios que todo lo ve u observa y que mata al tirano Antíoco Epífanes (el mismo término [ETIÓTITTJS, epoptes] es usado para el emperador [BAGD, 305]). Sobre tu Padre, véase 5,16.45.48 (el Padre y Dios de Jesús; 2,15; 3,17; 4,3.6). Para una comunidad minoritaria y marginal que vive un estilo de vida alternativo, el aplauso de la sociedad indica infidelidad a su identidad y línea de actuación. Dios, no la aclamación o aprobación pública, ha de constituir su apoyo. (Esto es parte de ese en rectitud que se pide a los discípulos.) Dios te recompensará en el juicio, una vez llevados a término sus planes. Sobre recompensa, cf. 5,12.46; 6,1.2.
6,5-15 UNA SEGUNDA ACCIÓN DE JUSTICIA: lA ORACIÓN El mundo antiguo se dirigía a sus dioses de dos maneras: con la oración y con acciones y dones (ofrendas sacrificiales, votivas). La presente unidad sobre la oración da por supuesta la unidad anterior en cuanto que apunta a dos errores en la plegaria 11 • En 6,5-6, el error concierne a la prác9. Deissmann (Light.from the Ancient East, 110-12) señala que la frase > (Sal 22,4.8.20; Mt 4,23-24). Véase también TestRub 4,9-11, donde Dios salva a José de Beliar (o Belial), el príncipe de los demonios, especialmente de la promiscuidad y de ciertas acusaciones, así como de sus hermanos ( TestSim 2.8; TestGad 2,5). Para rescates por Dios de enemigos personales, de situaciones apuradas y de vicios, cf. José y Asenet 12,7.11.12; 13,12; 27,10; 28,4; SalSl4,23; 12,1; 13,4. 28. Gerhardson, Testing ofGod's Son, 28-31; Houk, >. 30. Wolter, «TTapárrTw¡J.a», en EDNTIII, 33.
264
SEGUNDA UNIDAD NARRATNA (4,17-11,1)
a vosotros. El tiempo futuro es aquí más lógico que escatológico. Su misión de salvar del pecado la realizajesús perdonando ahora (9,1-8). Del Padre celestial se ha dicho en 6,4.6 que «Ve en lo secreto», y, en 6,8, que todo lo sabe; no hay, pues, escape. Los otros/hombres no son discípulos (aunque no están excluidos; véase 5,23-24). Este término se emplea para los de fuera, para aquellos a los que los discípulos van en misión (4,19; 5,16). El perdón se les otorga en imitación del amor de Dios (5,43-45). La importancia de perdonar es subrayada con su enunciación negativa en 6,15: Si no perdonáis a otros, tampoco vuestro Padre celestial perdonará vuestras ofensas. Sobre Padre celestial, véase 5,16.45.48; 6,1. Véase Eclo 28,4; Plutarco exhorta al perdón mutuo (> (19,16-17.29; 25,46), y antónimo de «infierno de fuego>> (18,8.9) y de (25,46). Denota la meta de la actividad de Dios y del camino de los discípulos. Los designios y el imperio de Dios son vivificantes. Su realización plena significa un retorno a la creación inicial ( 1,1; 14,32). Pero a la vez se les dice sobre esa vida que son pocos los que la encuentran (cf. 4 Esd 7,47-48.51.60-61 [pocos los salvados]). El verbo encontrar recuerda 7, 7-8 y la exhortación (a pedir, buscar y llamar) y afirmación de que se necesita la continuidad en ello y en el discernimiento del imperio de Dios en la vida diaria (6,33). El adverbio pocos sugiere la marginal y minoritaria comunidad de discípulos que lleva el paso cambiado con respecto a la mayoría. Una comunidad que, en su vivir a contrapelo de la sociedad central, está a menudo en tensión o conflicto con ella o sufre su opresión (Introducción, sección 7). Los discípulos han emprendido un duro camino, y no hay garantía de que todos lleguen a la meta. Les esperan además disensiones (13,36-43.47-50). Esta atribución de condición minoritaria tiene una larga tradición, ya se trate de grupos dentro de Israel o en relación con otras naciones: véase Gn 6 (Noé); 1 Re 19,10 (Elías);Jr 11,18-20; 15,10-21 (Jeremías); Eclo 36,1-22; Arist. 136-39; SalSl17; 1QS 1,5; 5,1-2.10.11; 9,5.8-9.20-21; 4 Esd 7,45-61.
19. Compárese este reconocimiento del carácter conflictivo de la existencia y la finalidad de participar en los planes de Dios con la aseveración de Plutarco de que, si bien hay gran sufrimiento para muchos (